Iglesia de Matías

La Iglesia de Matías es una de las la iglesias católicas con más historia en la ciudad de Budapest desde que fue construida en en el siglo XII como la primera iglesia parroquial de Budapest.

A lo largo de los años sufrió importantes remodelaciones, la más importante en el siglo XIX. La iglesia adopta su nombre por el Rey Matthias, quien gobernó desde 1458 al 1490 y celebró aquí su boda.

Ubicada en el Castillo de Buda, aquI eran  coronados los reyes de Hungría, desde el reinado de Matías. Aunque se la conoce como Iglesia de Matías, el nombre oficial es Iglesia de Nuestra Señora, y está dedicada a la Virgen María, Gran Señora y Patrona de los húngaros.

En la iglesia se encuentran las tumbas de Béla III y su esposa Ana de Antiochia. La Iglesia de Matías también ha sido la sede de bodas y coronaciones reales, una de las más importantes fue la de Carlos IV, el último rey de la dinastía de los Habsburgo, en 1916.

Gracias a su acústica, en la Iglesia Matías se celebran habitualmente conciertos de órgano y de música clásica.

La primera remodelación importante, de 1470, bajo el reinado de Matías Corvino, fue hecha en estilo gótico francés, pero sufrió sucesivas ampliaciones y modificaciones a lo largo de los siglos, siendo, incluso, convertida en mezquita, durante la época del dominio turco. Después de la reconquista, la iglesia recibió el nombre de Iglesia de San Esteban.

Las ampliaciones realizadas por distintos monarcas húngaros hicieron que este edificio no tenga, actualmente, un estilo arquitectónico único.

En la fachada, domina la torre de la campana de Matías, de 5 pisos. La roseta gótica del segundo piso había sido cubierta en el Barroco, pero reapareció durante la mayor remodelación que sufrió esta iglesia, entre 1874 y 1896, bajo la dirección de Frigyes Schulek, quien logró reconstruir la forma original de las piedras, a partir de unos pocos fragmentos.

La experiencia

Budapest es una ciudad increíble no solo con impresionantes maravillas arquitectónicas, sino también con un ambiente contagioso. Fuimos a la iglesia de Matías durante el recorrido a pie por la ciudad. La caminata hasta la iglesia fue fascinante, con mucha escalada, exploración involucrada y muy divertida.

El área de la iglesia es enorme, con muchos turistas abarrotando el lugar, pero la sensación es  increíble. La grandeza, la arquitectura y la historia detrás de todo fueron muy impresionantes. Hay muchos restaurantes también para que los turistas simplemente se sienten, se relajen y tomen una cerveza y algunos bocadillos para revitalizarse después de una larga caminata. En general, una experiencia brillante.